“Te escribo el día en que llegaste al mundo” Eso leí una tarde de frío. Estaba buscando un libro en la biblioteca, y encontré mi viejo cuaderno azul con figuritas de “Hello Kitty”. Demasiada nostalgia para una tarde de invierno, pensé. Y ahí te encontrabas vos. Como siempre, haciendo de mi una joven llena de desesperanzas y bohemia.
Era diciembre (“Llega diciembre” Fun People) Nadie espera nada en diciembre. Yo nunca esperé nada de él. Ultimo mes del año según el calendario lunar. “Te conocí en la escuela nacional, no comíamos mierda de nadie”. Vos lo dijiste. Nos vigilaban. Es que en ese entonces éramos tan inocentes y llenos de juventud. Los 60 habían terminado hace tiempo y la tecnología competía fuertemente con placeres mundanos como el sexo y las drogas. Pero en ese entonces la tecnología todavía no había invadido mi vida. Escribía poesías en cuadernos (a veces escribo poesías, a veces, tal vez una o dos poesías)
Nunca llegamos a conocernos. No nos conocimos como se conocen las demás personas. Llovía y tenía miedo. Me tomaste de las manos para que no cayera. Entramos. Respiramos. Ese aire famélico del bosque. Me subí a un árbol. Y me robaste un beso. Te dije que tus manos eran suaves, que parecían manos de mujer. Y otra tarde descubrimos que dentro tuyo existe una mujer. La sensibilidad, la fuerza para dar vida al mundo y conseguir cualquier cosa que imagines. Dentro tuyo existe una mujer, dentro tuyo existi yo un tiempo. fue la experiencia mas frenética de mi vida. la vida no esta tan mal después de todo. Moje mis labios en el mar, viaje al sur, tuve miles de noches de borracheras y logramos lo que siempre quisimos hacer desde que nos conocimos. “La Suciedad de los poetas muertos”. Ese es el verdadero nombre. Y éramos solo vos y yo. Era el puente, un par de cigarros, era verano, queríamos cambiar al mundo. Corramos, gritemos. Es verdad, era tan erótica y subversiva nuestra lírica. Románticos. Éramos románticos. Queríamos cambiar al mundo con simples poesías. Y vos lo dijiste. “O esto no mata y nos arruina la vida o no sé que pasará” No enloquecimos cuando creíamos que enloqueceríamos. No solo me regaste esta locura, me regaste una tarde en la cual fuimos a la sala de ensayo y conocí al joven manos de tijera. Él era lo extraño en medio de tanta homogeneidad, en medio de lo banal, era él. Era extraño y no hablaba mucho. Es que tenia mas cosas para decir que nosotros dos juntos. y nosotros nos creíamos los mas “rockers”, los mas intelectuales y soberbios. Vos me adulabas, yo te adulaba. Vos me decías que tenia lindos ojos y yo te mentí un día y te dije que cantabas similar a Fede Moura.
Y asi se nos pasaron los dias. En medio de confusiones (creía que estaba enamorada de vos) palabras inútiles, manipulábamos la tecnología y destruíamos arte. Es verdad, vos escribías unos versos y yo te respondía con otros. Y así, completábamos una bella poesía. Pero nunca invente nada. Y vos lo sabes. Sabes perfectamente como puedo llegar a manipular la realidad con un par de metáforas, y tengo tu control y lo sabes. Ese siempre fue nuestro juego. Pensar una nueva forma para encontrarnos en la ficción y ser aquellos que en la vida mundana jamás seremos. Y sabes que siempre el erotismo empezaba con un verso tuyo. Dabas el primer paso, porque era una niña y respetabas que a veces me inhiba. Pero al final lograbas lo que querías. Terminaba regalándote todo de mi y después llenabas de sonidos tu cuarto y eso era todo. Ed Sullivan tenia una nueva canción. Y me sentía tan feliz. Y quiero que dejes de perder tiempo y empieces a repartir música por la ciudad. Como ya sabes, nuestro corazón es un poco exquisito y under. Y recuerda esto: “Es mejor que la gente no te entienda. Preocupate cuando te empiecen a entender”. Dentro de unos dias “me convertiré en un humano mas” Y aunque el enojo hacia vos no pase (vos sabes porque, vos sabes que no invente nada, tal vez fui muy ingenua y caí en tu juego lirico y no pude comprender que solo querías jugar). En estos momentos todos siguen con sus vidas. Yo sigo creyendo que se puede cambiar al mundo, o a los hombres. Ya que sé que soy mas puta que una actriz pornográfica, y sé que logré que todos se exciten con mis poesías, hombres y mujeres. Recuerda siempre nuestro lado homosexual. Detrás de mi cuerpo común y corriente se encuentra una idiota psedopoetisa. No lo olvides, el tiempo, los enojos, los malos entendidos, los lugares, lo que dijimos y no debimos decir, las diferencias ideológicas y políticas son separarán siempre. Pero sé que esas palabras inútiles que siempre vas a decir y esas que siempre vas a ocultar van a estar dirigidas a mi. Antes compartías tus textos conmigo. Y con el tiempo yo compartiré tu lírica “nadaista” y cursi con mis alumnos y con mis hijos (Federico y Anita) Lo especial que tuvimos hace que disfrute de los buenos recuerdos que tenemos juntos. Lo especial que tuvimos y que vamos a tener siempre, hace que a pesar de toda la mierda que pasó, te quiera mucho y te respete como poeta urbano. Con el tiempo uno olvida, los rostros, los olores, los sonidos y las palabras. El tiempo nos sometió al crecimiento.. Adiós! Y no olvides de despertar por la madrugada cuando sea invierno de vuelta y estemos en los 60. Conoceremos a la perfecta hija de las flores.